Según los especialistas en el tema y las leyendas escritas, la tormenta de Santa Rosa es un fenómeno que llega de forma anual, cinco días antes o después del 30 de agosto. De este modo, año tras año, se esparce por las calles el temor y la preocupación por los daños que podría ocasionar dicho temporal en los rincones del país.
Se trata de una manifestación climatológica de la naturaleza que atrae fuertes lluvias y mucha actividad eléctrica en el cielo.
Hasta el momento, los miembros del SMN desestimaron las posibilidades de que lleguen al territorio tormentas de grandes magnitudes pertenecientes al temporal de Santa Rosa el miércoles 30 de agosto y sostuvieron que no se presentan las condiciones propicias para que esto suceda hasta recién llegado el próximo fin de semana en plena entrada triunfal de Septiembre
Donde las condiciones climáticas advierten inestabilidad con probables lluvias y tormentas comenzando el sábado, luego de pasar por elevaba temperatura al final del viernes.
Mito e historia de la tormenta de Santa Rosa
El famoso temporal recibe su nombre a partir de las celebraciones religiosas que se festejaban y conmemoraban cada 30 de agosto en Lima, Perú. Según estadísticas realizadas con información recogida del Observatorio Central Buenos Aires (OCBA), de datos tomados del 25 de agosto al 4 de septiembre (5 días antes y después de Santa Rosa) desde 1906 hasta 2021, el análisis demostró que en esos 116 años de registro, solo en 65 oportunidades se produjeron tormentas en esas fechas y no siempre fueron precipitaciones de gran intensidad.
El relato popular que se mantiene vigente hasta nuestros días tiene sus orígenes en el año 1615. El mito cuenta que en ese entonces, una fuerte tormenta se abrió paso luego de que Isabel Flores de Oliva, una religiosa peruana de la orden de los dominicos, le rezara al cielo. Ella, fue considerada la primera santa de América, ya que se dice que sus plegarias impidieron que piratas holandeses atacaran la ciudad de Lima, en Perú.